La paciencia de un hombre...

Tren de Coruña con destino a Madrid. En el vagón va sentado un hombre y enfrente una madre con su bebé en brazos.
El bebé comienza a llorar y la mujer para consolarlo saca el pecho y le da un rato, el niño sigue llorando así que le saca el otro pecho y le vuelve a dar sin mucho éxito.
La mujer le dice al bebé:
Hijo mío, tómate la teta, que si no, se la voy a dar a ese señor de ahí enfrente (el señor la mira con cara de circustancias).
El niño sigue llorando y se duerme. ..... Al rato se despierta y vuelve a llorar, la mujer le da de nuevo el pecho, pero el bebé sigue llorando y le vuelve a repetir:
Hijo mío, tómate la teta, que si no, se la voy a dar a ese señor de ahí enfrente.
Y así continuó todo el viaje.
Cuando quedan 15 minutos para llegar a la estación de Madrid-Atocha, el bebé vuelve a llorar. La madre, le saca los pechos pero el niño sigue llorando sin parar, le vuelve a repetir por enésima vez: hijo mío, tómate la teta, que si no se la voy a dar a ese señor de ahí enfrente.
En esto que el señor se levanta del asiento, ansioso y desesperado y le dice a la madre:
Señora, por Dios, decídase de una vez, que me tenía que haber bajado en Medina del Campo.